Publicada
en la sección Correos de La
Prensa del 11 de abril de 2013 como:
Olvido ciudadano
Señor director:
Ante el temporal que inundó
importantes zonas de la Ciudad
de Buenos Aires, se habla de los daños en viviendas, comercios, cocheras y
muertes, sin concretar una descripción detallada de las causas de las fuertes inundaciones como ser:
1) una lluvia intensa que descargó 155 mm. en dos horas, volumen superior al que cae en dos meses; 2) ese volumen en
una cuadra fue de 144.000
litros, por lo que las
cocheras y bauleras subterráneas existentes resultaran inundadas; 3) muchas
de las construcciones afectadas fueron construidas en zonas bajas; 4) las
alcantarillas no concretaban el necesario escurrimiento, por la basura
producida por vecinos que abandonan en
veredas y cordones botellas de todo tipo, envases de golosinas, comidas,
cigarrillos, papeles, cajas y cajones, electrodomésticos y equipos de PC
obsoletos, hasta muebles rotos o restos de materiales de construcción, además
de las bolsas de basura destruidas por
los cartoneros, como de la basura extraída de los contenedores municipales
buscando elementos “comerciales”.
Todo producto por un lado, del olvido
ciudadano que la ciudad más limpia no es la que más se limpia sino la que menos
se ensucia, y en segundo lugar que las fuerzas de la naturaleza como
inundaciones, aludes, tsunami, tifones, maremotos, son superiores a las del
hombre, por lo que cabe no buscar rédito político o publicitario de esos
eventos, y si, ante lo imprevisible
individualmente desde la sociedad y de los órganos de gobierno, buscar acciones
correctivas o reparadoras, del tipo japonés ante los terremotos o
estadounidense ante los tornados del Caribe.
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